Soy una mujer madura, viví experiencias intensas y abundantes errores (sí, vale, aprendizajes) y mi mayor mérito es seguir viva ya que atravieso mi segunda depresión. Soy un montón de contradicciones, una mezcla extraña de miedos y atrevimiento, de hiperactividad y apatía, de anhelos y decepciones…. Desde siempre escribí, fue mi salvavidas, pero ahora afronto este blog como una terapia, como una manera de expresar quién soy a ver si avanzo en esto de conocerme, aceptarme y por fin, apreciarme. Si además te acompaña en tu recorrido o te distrae, encantada.
Madre, abuela, ex esposa, hermana, hija…
Soy muchas cosas y ninguna de ellas me define. Tuve 4 hijos aunque podían haber sido 6 si no… La primera nació siendo yo adolescente y el último, 20 años después. Soy abuela (aunque ejerzo poco) de dos preciosas jovencitas y un pequeñajo. Me casé dos veces y las dos me divorcié o separé, o volví y me volví a separar… un lío.
Soy la tercera de una familia muy numerosa asentada desde siempre en el sur de España.
A qué me dedico?
Trabajé más de 30 años como funcionaria, al tiempo que estudié periodismo porque siempre me gustó escribir y aprender. Antes de eso trabajé desde los 14 años dando clases particulares, cuidando niños, limpiando y recogiendo cosechas en el campo.
El trabajo fijo me dio una seguridad que necesitaba, o eso creía, pero a pesar de todas las estrategias que desplegué para sobrevivir en él no pude más y hace dos años que nos dejamos. Causa oficial: baja por síndrome ansioso depresivo.
Sí, no soy tan valiente, a pesar que sabía que me estaba apagando como una vela, no tuve fuerzas para dejarlo todo y cambiar de vida. Ahora mi amiga la depresión es mi maestra, a veces dura, exigente, implacable, pero maestra.
La depresión, una vieja amiga
Hace doce años tuvimos otro romance la depresión y yo y a partir de ahí empecé un recorrido que me llevó por distintas terapias, a leer montones de libros de autoayuda, de siquiatría, de espiritualidad y a formarme y trabajar como terapeuta de masaje bioenergético, PNL, EFT, y algunos más que para qué aburrir al personal….
Ahora me dedico a seguir adelante, como puedo, así sin más. No puedo contar aún lo maravillosa que es mi vida tras la depresión porque aún estoy en ella. Claro que más recuperada, si no, no podría ni escribir esto, pero me queda recorrido, y espero que se me haga más liviano compartiéndolo aquí. No pretendo enseñar nada, más bien aprender, estoy abierta a recibir tu opinión y seguramente te contestaré, pero aún no me siento preparada para un debate abierto. Aquí empieza la aventura, me acompañas?